El vicepresidente del CGPJ quiere apartar ya al juez Garzón
PÚBLICO. 20/03/2010
PÚBLICO. 20/03/2010
De Rosa sostiene que "nadie tiene méritos adquiridos" para ser considerado de forma diferente por la Justicia
DOBLE RASERO
Para De Rosa, vicepresidente del CGPJ, basta que un juez como Baltasar Garzón esté en trámite de ser imputado para que tenga que ser suspendido, pero si se trata de un presidente de la Generalitat valenciana, no pasa lo mismo, puesto que él se puso desde el primer día a su servicio para que no pudiera ser juzgado.
A Francisco Camps no le han exculpado de recibir regalos, trajes en concreto, sino que en un subterfugio judicial, que anula la ley de cohecho impropio, un tribunal presidido por otro de sus amigos, De La Rua; sentenció que no se puede demostrar que los trajes los recibiera por el hecho del cargo que ocupa, pues podrían habérselos dado por otros motivos. Camps ha mentido en sede parlamentaria, pese a haberlo negado públicamente, tenía una profunda amistad con el cabeza de la Gürtel en estas tierras, “el bigotes”, al que dedicaba lindas palabras y del cual él y sus familiares recibían valiosos regalos, como demuestran las conversaciones publicadas en El País, además de otras pruebas.
¿Es legitimo que el presidente de una institución como el gobierno de una Comunidad Autónoma pueda aparecer relacionado, mediante lazos de amistad e intercambio de favores con uno de los cabecillas de una red corrupta, que obtenía importantes beneficios de su labores en estas tierras, sin que se asuma ninguna responsabilidad ni ética, ni política, como si no hubiera pasado nada, como si nada hubiera salido a la luz?.
¿Es normal en un Estado de derecho, que importantes miembros del sistema judicial den cobertura legal a este tipo de conductas, mientras la emprenden contra el juez que instruyó las pesquisas e investigaciones que llevaron a desvelar la trama Gürtel?
¿ Qué repercusiones puede tener para nuestro sistema democrático, y para la credibilidad de nuestras instituciones jurídicas que los implicados en el caso Gürtel , tanto los miembros directos de la trama, como los políticos que permitían y se beneficiaban de su funcionamiento, se vayan “de rositas”?¿Qué puede pasar si el juez que la destapó acaba suspendido o inhabilitado?¿Qué otro juez se atrevería a iniciar una investigación de este calado? ¿Qué valoración podrán tener los ciudadanos y ciudadanas de este país de la política y de nuestras instituciones? ¿A alguien le interesa esta desafección de la ciudadanía -por “la cosa pública”?
A Francisco Camps no le han exculpado de recibir regalos, trajes en concreto, sino que en un subterfugio judicial, que anula la ley de cohecho impropio, un tribunal presidido por otro de sus amigos, De La Rua; sentenció que no se puede demostrar que los trajes los recibiera por el hecho del cargo que ocupa, pues podrían habérselos dado por otros motivos. Camps ha mentido en sede parlamentaria, pese a haberlo negado públicamente, tenía una profunda amistad con el cabeza de la Gürtel en estas tierras, “el bigotes”, al que dedicaba lindas palabras y del cual él y sus familiares recibían valiosos regalos, como demuestran las conversaciones publicadas en El País, además de otras pruebas.
¿Es legitimo que el presidente de una institución como el gobierno de una Comunidad Autónoma pueda aparecer relacionado, mediante lazos de amistad e intercambio de favores con uno de los cabecillas de una red corrupta, que obtenía importantes beneficios de su labores en estas tierras, sin que se asuma ninguna responsabilidad ni ética, ni política, como si no hubiera pasado nada, como si nada hubiera salido a la luz?.
¿Es normal en un Estado de derecho, que importantes miembros del sistema judicial den cobertura legal a este tipo de conductas, mientras la emprenden contra el juez que instruyó las pesquisas e investigaciones que llevaron a desvelar la trama Gürtel?
¿ Qué repercusiones puede tener para nuestro sistema democrático, y para la credibilidad de nuestras instituciones jurídicas que los implicados en el caso Gürtel , tanto los miembros directos de la trama, como los políticos que permitían y se beneficiaban de su funcionamiento, se vayan “de rositas”?¿Qué puede pasar si el juez que la destapó acaba suspendido o inhabilitado?¿Qué otro juez se atrevería a iniciar una investigación de este calado? ¿Qué valoración podrán tener los ciudadanos y ciudadanas de este país de la política y de nuestras instituciones? ¿A alguien le interesa esta desafección de la ciudadanía -por “la cosa pública”?
No hay comentarios:
Publicar un comentario