Un gobierno carcomido por la corrupción, que está llevando la economía valenciana a la bancarrota, sólo puede mantenerse intentando acallar a la ciudadanía y silenciando las protestas. Cuando no existe ni la decencia ni la responsabilidad pública cualquier medio es válido para mantenerse en el poder: la manipulación informativa descarada en los medios de comunicación que controlan, la censura y la intimidación, e incluso, llegado el caso, el ejercicio de la represión.
Juicio por desobediencia contra los manifestantes que intentaron impedir derribos en El Cabanyal
Un juzgado de Valencia cita para el día 22 de septiembre a una treintena de personas a raíz de una denuncia de la Policía Local
EL PAÍS - Valencia - 06/09/2010
Críticas a Font de Mora tras la sentencia que anula la sanción a un profesor
EL PAÍS
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